Sin duda las Lagunas de Torrevieja son el lugar más asombroso de la zona, este inmenso Parque Natural de 3.700 hectáreas es un icono de Torrevieja. Es un espacio protegido compuesto por 2 grandes lagunas de agua salada destaca principalmente por su fauna y flora únicas. La gran afluencia de flamencos a estas lagunas las hace de gran interés ornitológico.
Son las lagunas productoras de sal más importantes de Europa y han sido explotadas desde tiempos de los romanos. Es un excelente lugar para ir a disfrutar en familia de un paseo por la naturaleza y tomar unas buenas fotos. Durante la puesta de sol, se puede apreciar una magnífica vista de las montañas de sal.
Hay dos rutas para todos los públicos a través del Parque Natural, una peatonal de 3.500 metros y otra ruta para ver las lagunas en bici de 5 kilómetros.
No olvides tu cámara de fotos o te arrepentirás, en las Lagunas de Torrevieja podrás hacer unas fotos dignas de concurso.
El paisaje es una mezcla entre un universo desolado y un mundo salvaje, durante las diferentes estaciones del año podemos ver cómo cambia el paisaje.
A finales de verano el agua se vuelve totalmente rosa, esto es debido a una bacteria que vive en el agua. Las vistas son realmente alucinantes.
La historia de cómo se formaron las lagunas es tan curiosa como su actual peculiar aspecto. Hace miles de años la zona se encontraba totalmente cubierta por el agua del mar, con el paso del tiempo el nivel del agua fue bajando hasta que las lagunas se formaron, se ha velado por su conservación y aprovechamiento desde tiempos de los romanos.