La sanidad en España es considerada una de las mejores en todo el mundo, además la zona mediterránea es uno de los lugares del mundo más agradables y saludables para vivir, así lo reconoce la Organización Mundial de la Salud.
El sistema de sanidad pública funciona muy bien en España, siempre que seas español. En el caso de ser extranjero puede llegar a ser un poco desquiciante, debes rellenar un buen número de documentos y dedicar unas cuantas mañanas a obtener tu derecho a la sanidad pública. El permiso de residencia y el N.I.E son los documentos que necesitarás para poder solicitar tu número de la Seguridad Social, el cual te dará acceso a los servicios sanitarios españoles.
El proceso para obtener la sanidad en España puede prolongarse en el tiempo, en muchos casos es mejor recibir la ayuda de un profesional.
Una vez que poseas el número de la Seguridad Social podrás ir a todos los hospitales y centros médicos españoles. Hace unos años era mucho más facil obtener el número de la Seguridad Social para los extranjeros, hoy en día muchos optan por acudir a centros médicos y clínicas privadas. La mayoría de las personas que únicamente residen en España durante unos meses al año están escogiendo esta opción, principalmente por su comodidad y eficiencia.
La sanidad privada en España se está expandiendo muy rápido, la costa mediterránea goza de una amplia oferta médica con excelentes profesionales. En la mayoría de centros privados se atiende a los pacientes en varios idiomas. Por esta y otras ventajas la mayoría de los extranjeros optan por este sistema sanitario y de este modo evitan los trámites necesarios para la sanidad pública.
Farmacias
En todas las ciudades españoles encontraremos una farmacia donde comprar medicinas, son fácilmente reconocibles por la gran cruz verde en su fachada. Los precios pueden variar de una farmacia a otra, normalmente dependiendo de su localización. Podremos obtener las medicinas más comunes sin problemas pero para aquellas medicinas más específicas se nos exigirá una receta médica. Al menos una farmacia de cada ciudad debe permanecer abierta las 24 horas del día, esta se conoce como «farmacia de guardia».